Dyna 2000 – Fase Bobber
Esta es la versión “por ahora terminada” de la Dyna. Asiento individual, postura canalla, escapes Joker y un filtro de aire más compacto que encaja con la línea de la moto. A partir de esta foto volvemos al principio y vemos cómo se llegó hasta aquí.
La idea desde el primer momento era clara: simplificar, bajar el centro visual y sacar una Dyna que pareciera más un bobber bruto que una moto de serie con cuatro accesorios.
Asiento flotante, soporte lateral y horquilla más seria
El primer paso fue el asiento. Quería algo flotante, tipo bobber, pero usable en el día a día. De una chapa de hierro salió la base: recortada a radial, doblada, presentada una y otra vez sobre el chasis hasta que la postura empezó a tener sentido. Debajo, los muelles, para darle ese toque clásico de moto vieja que siempre suma.
Aprovechando que ya estaba con hierro, bajé el velocímetro al lateral del motor con un soporte artesanal. La idea era limpiar la zona del manillar y que todo lo importante se quedara lo más bajo posible.
Y delante, un puente de horquilla hecho a medida para dar algo más de rigidez a las barras. Son detalles que no se ven a simple vista, pero se notan cuando empiezas a rodar: la moto se siente más sólida, menos “barca”.
Primeros intentos de escape y la moto “a medias”
El siguiente paso fue meterle mano a los escapes. Sobre el papel, un juego que encontré parecía perfecto para el proyecto… pero la realidad es que estaban pensados para una Softail, no para esta Dyna.
Los probé, jugué con posiciones, pero no terminaban de encajar ni en geometría ni en sensación. Tocó asumirlo: a la venta y a otra cosa.
En estas fotos se ve la moto ya bastante montada: asiento, puente, chapa frontal… pero todavía con el escape provisional y la pintura sin ser la definitiva. Además, el conjunto del asiento con muelles no terminaba de encajar visualmente conmigo.
Ajustando el asiento y la primera versión pintada
La solución con el asiento fue sencilla: fuera los muelles. Al eliminarlos, la línea general de la moto se limpió bastante y todo empezó a verse más compacto y coherente con la idea de bobber que tenía en mente.
A partir de ahí, tocó cerrar una primera versión de pintura y tirar con el escape original, envuelto con cinta anticalórica blanca mientras encontraba algo que de verdad encajara.
Aquí ya se ve la moto con su primera “pinta seria”: pintura lista, asiento ajustado y escapes originales con cinta blanca, a la espera de encontrar algo a la altura del resto del proyecto.
Aun así, tocaba disfrutarla. Ruta, foto en la playa y cabeza maquinando cuál iba a ser el siguiente paso gordo: los escapes definitivos.
Escapes Joker: ahora sí
El cambio serio vino cuando encontré unos escapes Joker a buen precio. Esta vez sí encajaban de verdad con la moto y con lo que llevaba tiempo buscando en mi cabeza.
Una buena limpieza, cinta anticalórica en color bronce y, de repente, la Dyna se transformó. Tanto en sonido como en presencia, era otra moto.
El último detalle fue el filtro de aire que ves en la foto principal: más pequeño, tipo breather, con panel de abeja. Con eso cerré esta fase. No es definitiva, pero sí el punto en el que dije: “así se queda… de momento”.
Lo que pasa alrededor de la moto
Más allá de los hierros, lo que te acabas llevando son momentos: fotos rápidas antes de ir al curro, quedadas improvisadas y gente que vive las motos igual de fuerte.
Una de esas paradas fue con Ahikar (Ahikarnet), conocido por su papel en “La casa de papel” y por ser otro enfermo de las motos. Pasó por Almería con su Harley, nos tomamos una birra en el puerto de Aguadulce y, como siempre, la conversación acabó entre hierros, rutas y proyectos.
¿Te montarías algo así?
Si tienes una Dyna, una Harley o cualquier moto a la que quieras darle una vuelta hacia algo más personal, podemos ver qué se puede hacer: asiento, escapes, detalles artesanales o un proyecto completo.